Las verduras al horno son una receta sencilla, saludable y fácil de preparar. Con esta técnica de cocina se conserva mejor el sabor de las verduras y según la temporada es posible variar los ingredientes. Serán ideales para acompañar carnes y pescados, especialmente útiles cuando no tienes muchas ganas de cocinar y buscas una receta que esté lista en pocos minutos.
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¿Qué verduras se pueden cocinar al horno?
Casi todos los vegetales pueden cocinarse en el horno. Patatas, calabazas, berenjenas, pimientos, brócoli, champiñones, zanahorias, calabacín, incluso cebollas y tomates, casi todo puede frotarse con un poco de aceite de oliva para cocerse al horno en unos pocos minutos. En las siguientes líneas te ofrecemos una receta básica de verduras al horno y algunos trucos para facilitar la preparación.
¿Cómo hacer verduras al horno de forma sencilla?
Existe una variedad amplia de recetas de verduras al horno. Sin embargo, todas estas recetas comparten elementos base en cuanto a la preparación, variando únicamente en la selección de ingredientes a utilizar. Para esta receta en particular estaremos utilizando la siguiente combinación de ingredientes:
- 1 calabacín.
- 2 tomates grandes.
- 1 berenjena.
- 1 cebolla.
- 1 zanahoria.
- 3 patatas.
- 1 pimiento rojo.
- 6 champiñones.
- Aceite de oliva.
- Sal y pimienta.
Para el aliño que mejorará el sabor natural de los vegetales, utilizaremos:
- 2 dientes de ajo.
- Perejil fresco.
- Aceite de oliva extra virgen.
El procedimiento previo es bastante sencillo. Primero se lavan, se pican finamente y se mezclan los ingredientes del aliño y se reservan. Lo siguiente será lavar bien las verduras que irán al horno, cortarlas en rodajas de medio centímetro, sazonarlas utilizando sal y pimienta al gusto. Algunas de ellas necesitarán ser peladas como es el caso de la zanahoria y la cebolla.
Una vez con todos los ingredientes cortados y sazonados, procede a colocar todas las verduras sobre una bandeja cubierta con papel de hornear. Las organizaremos en la bandeja y antes de colocar al horno, añadiremos un chorro de aceite de oliva extra virgen. El horno debería estar precalentado a una temperatura de 180°C.
El tiempo de cocción de las verduras al horno es de entre 30-35 minutos. Por supuesto, a los primeros 15 minutos tendrás que sacar la bandeja del horno, voltear cada pieza y luego pintar todo con el aliño de aceite, ajo y perejil que teníamos reservado. Luego de esto, deja hornear por espacio de 10 minutos y tendrás tus verduras al horno listas.
Consejos para tus verduras al horno
Siempre que prepares verduras al horno, pero muy especialmente durante la primera vez, tendrás que revisar con frecuencia el estado de cocción hasta dar con la cantidad de tiempo exacta en la que llegan a estar 100% listas. Esto es necesario debido a que cada horno es diferente y a cada persona pueden gustarle las verduras más o menos cocinadas.
Algunos trucos adicionales para esta preparación:
- Limpia muy bien todas las verduras y retira las cáscaras si lo consideras necesario. En verduras o tubérculos como la cebolla, la patata y la zanahoria es posible que las cáscaras resulten incómodas para el comensal, así que será conveniente retirarlas. Por el contrario, las berenjenas y el calabacín se pueden consumir perfectamente con su cáscara.
- Corta cada pieza de forma pareja, preferiblemente en rodajas de un máximo de dos centímetros. El tomate puede cortarse un poco más grueso, debido a que pierde el agua y reduce su tamaño.
- Utiliza aceite de oliva extra virgen para potenciar el sabor de las verduras. También puedes hacer uso de hierbas aromáticas y dar diferentes matices a la preparación. En nuestro caso, para la receta anterior combinamos ajo y perejil, pero seguro tienes muchas otras opciones en casa para experimentar.
- El queso parmesano molido puede utilizarse para gratinar las verduras durante los minutos finales en el horno, consiguiendo intensificar todos los sabores.
- Utiliza una bandeja con las paredes bajas. Esto permitirá que el calor circule de manera uniforme entre las verduras haciendo que su cocción sea más eficiente.
- Revisa que todas las verduras tengan espacio suficiente en la superficie de la bandeja. Si un trozo llega a quedar por encima de otro, no tendrá la misma calidad de cocción que otro que sí ha estado bien apoyado a la bandeja. Cuando las verduras quedan muy juntas, no lograrás que estas queden doradas y crujientes.
- No olvides utilizar papel de horno. Si no lo haces, tus verduras terminarán pegadas a la bandeja y terminarás rompiéndolas cuando intentes sacarlas para servir.
- Si no deseas terminar con algunas verduras quemadas y otras con la cocción incompleta, entonces tendrás que pincharlas con un tenedor de vez en cuando. Aquellas que vayan estando listas, puedes retirarlas del horno.
- Agrupar las verduras según el tiempo de cocción también es una buena idea, pues te ayudará a retirarlas con mayor facilidad cuando consideres que ya están listas.
- Prueba con otros aceites. Uno de los elementos más comunes en la cocina, especialmente dentro de la dieta mediterránea, es el aceite de oliva extra virgen. Sin embargo, es posible utilizar aceite de sésamo, ajonjolí o coco, cada uno de ellos es capaz de ofrecer diferentes cualidades aromáticas a nuestros alimentos.
Tiempo de cocción ideal para las verduras al horno
La temperatura del horno tiene incidencia sobre la calidad del platillo final. Es importante que el horno se encuentre caliente al momento de insertar la bandeja con verduras en su interior, siempre controlando la temperatura alcanzada. Lo mejor será realizar la cocción a unos 180°C para lograr que las verduras mantengan una textura agradable al paladar.
Con un horno a temperatura entre 120°C – 150°C, las verduras quedarán bien cocidas, de textura tierna pero no lograrás que estas se doren en el exterior. Cuando mantienes el horno a temperaturas entre 150°C y 220°C, entonces podrás obtener un alimento tierno en el interior y con una capa externa crujiente, textura perfecta para disfrutar tus verduras al horno.