¿Cómo conciliar mi rutina de entrenamiento y el trabajo?

La sociedad española está naturalizando la actividad física como una tarea más de su día a día. Para evitar lesiones y obtener el máximo rendimiento, resulta imprescindible conocer las rutinas de entrenamiento.

Un reciente estudio de la Universidad de Alicante, España es el país europeo que cuenta con más abonados a algún centro deportivo. Un 10% respecto al 7% de los demás países de la Unión Europea. Sin embargo, este porcentaje no significa que el 10% de la población española acuda a estos centros .Muchas de las personas que están inscritas en centros deportivos acuden a ellos una sola vez por semana y esto se debe a la falta de organización.

Es muy importante en este aspecto llevar un estilo de vida saludable en cuanto a la alimentación, ya que si nos encontramos cansados o con poca energía no desarrollaremos igual nuestra rutina de entrenamiento. Una buena idea es cargar las pilas en el desayuno, la  comida más importantes del día. Hay que tener en cuenta que cuando por la mañana tras despertarnos llevamos sin comer unas 7 u 8 horas, esas son las horas que debemos intentar dormir según los expertos.

Entrenamiento

Al igual que es importante el desayuno también lo son el resto de comidas. Debemos alimentarnos bien para afrontar nuestra planificación en la que incluyamos el deporte. La rutina después de realizar el ejercicio igual de fundamental para alcanzar los objetivos. Hay varios suplementos post entrenamiento que ayudan a maximizar los esfuerzos.  Según los objetivos, estos pueden ser un batido de proteínas o un bocadillo. Otro buen complemento es la creatina Olimp ya que ayuda a regenerar nuestros músculos más rápido. La marca Olimp Sport ofrece una amplia variedad de productos.

Para que el cuerpo se recupere como es debido también es muy importante planificar un rutina de entrenamiento para no sobrecargar los músculos.  En los centros deportivos suele haber personal que puede ayudar en esta tarea. Una buena opción es alternar los grupos musculares y trabajarlos con al menos un día de descanso. Por ejemplo, trabajar un día los músculos del tren superior y al día siguiente los del inferior. Es muy importante descansar entre series ya el sobresfuerzo puede provocar lesiones, además de un buen calentamiento para entrar en calor y no olvidarnos de los estiramientos cuando acabemos nuestra rutina.

Conciliar el trabajo, la vida familiar y el ocio con el entrenamiento suele ser bastante complicado y en la mayoría de los casos prescindimos de hacer deporte para tener más tiempo. Sin embargo, querer es poder. Un buen método para asegurarnos que vamos a ir al gimnasio es llevar con nosotros la bolsa de deporte. Pensar el día de antes a qué hora iremos al gimnasio y qué haremos. Si tenemos que madrugar mucho para ir a trabajar lo lógico será ir al gimnasio después; al contrario, iremos antes.

Cuando planificamos nuestro día a día nos damos cuenta de que somos capaces de hacer muchas cosas, por eso es importante la organización. Tener una idea de cómo vamos a desarrollar el día para poder hacer todo lo que nos propongamos.