La sensación de pesadez y cansancio en las piernas puede ser causada por una variedad de motivos, entre ellos, el aumento de las temperaturas.
¿Por qué ocurre esto? Varices, tobillos hinchados y otras molestias similares parecen agravarse durante la época del verano, sobre todo al final del día, lo cual se debe a un proceso de vasodilatación provocada por el calor que causa una serie de sensaciones desagradables.
Hoy veremos cuáles son las causas, principales síntomas y el tratamiento disponible para tratar el dolor y las molestias en las piernas durante el verano.
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¿Cuáles son las causas del dolor de piernas en el verano?
El dolor de piernas durante el verano es un trastorno causado por las altas temperaturas, un factor que permite el aumento de la dilatación venosa.
Por lo general, el paciente presenta los síntomas una vez que ha completado alguna actividad física como nadar, andar en bicicleta o una simple caminata.
Las altas temperaturas hacen que la circulación se resienta, algo que comienza a producir una sensación de pesadez, cansancio, hormigueo, calambres, adormecimiento e incluso hinchazón y dolores fuertes.
Cuando las venas se dilatan a causa de la exposición prolongada a las altas temperaturas, las válvulas que envían flujo sanguíneo al corazón hacen más difícil el recorrido, provocando los síntomas que hemos mencionado en líneas anteriores.
Lo que ocurre, es que el calor al que estamos expuestos durante la época de verano puede aumentar la incidencia de los dolores en las piernas, principalmente en personas que presentan las siguientes características:
- Sedentarismo
- Insuficiencia venosa
- Menstruación
- Obesidad
- Retención de líquidos
- Mala circulación sanguínea
- Deshidratación
¿Cuál es el tratamiento para el dolor de piernas durante el verano?
Cuando se presentan los síntomas descritos: picazón, adormecimiento, cansancio excesivo, hormigueo, calambres, rigidez y pesadez, se vuelve necesario aplicar tratamientos que alivien el problema.
Existe un medicamento para el dolor de piernas que trata específicamente el problema de la vasodilatación y que es muy útil tanto a nivel preventivo como correctivo. Pero también podemos aplicar algunos tratamientos naturales para aliviar el dolor de piernas producido en verano.
Los baños de agua tibia son una buena solución, aunque resulten un poco incómodos dadas las altas temperaturas. Un baño con agua tibia puede reducir la inflamación de forma inmediata y mejorar el dolor rápidamente.
Aplicar compresas con vinagre de manzana es otro tratamiento casero muy efectivo. Solo tienes que sumergir un pañuelo en vinagre, colocarlo en la zona afectada durante 15 minutos y ver como el hormigueo y otras molestias comienzan a desaparecer.
También resultan muy efectivos los masajes en la zona, ya que estos mejoran la circulación de la sangre y reducen los procesos inflamatorios e incluso disminuyen los efectos de la retención de líquidos.
Debes tener en cuenta que la hidratación y una alimentación adecuada es fundamental durante el verano, así como realizar alguna actividad física de forma frecuente para mantener el buen funcionamiento del sistema circulatorio.