Constantemente escuchamos y entendemos lo necesario que es mantener una ‘vida saludable’. Sin embargo, vivimos en un mundo complejo y lleno de distracciones, donde el trabajo y las responsabilidades nos absorben hasta el punto en que perdemos de vista lo importante que es cuidar de nosotros mismos.
Para compensar los efectos del estrés de la vida moderna, es necesario desarrollar una mayor cultura de prevención que nos permita adoptar hábitos más saludables. Como referencia en este proceso, es posible utilizar la información disponible en portales web especializados como saludybienestar365.com, una página constantemente actualizada sobre temas de salud y bienestar.
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¿Cuáles son los beneficios de llevar una vida saludable?
Es necesario comprender que llevar una vida saludable ofrece múltiples beneficios tanto físicos como mentales, los cuales no deberíamos ignorar.
Ayuda a mejorar tu humor y estado de ánimo
Cuando consumes alimentos de alto valor nutricional y sigues una rutina de ejercicio físico de intensidad moderada, tu organismo recibe los nutrientes que necesita para funcionar de manera correcta y se incrementa la producción de serotonina y endorfinas. En consecuencia, notarás mayor energía, vitalidad, mejorando tu humor y estado de ánimo.
Reduce el riesgo de desarrollar enfermedades crónicas
Manteniendo un estilo de vida más saludable se obtiene una mejora en el estado de salud general, lo cual reduce las probabilidades de contraer enfermedades crónicas y degenerativas. Por ejemplo, al mantener bajo control los niveles de azúcar y colesterol en la sangre, se evitan padecimientos como la diabetes, hipertensión y enfermedades coronarias.
Influye de forma positiva en tu salud mental
Hacer ejercicio y mantener una dieta saludable, abundante en ingredientes naturales y reducida en alimentos ultraprocesados puede ayudar a mejorar la salud mental, así como a colaborar en la reducción del estrés y la ansiedad. Además, la adopción de hábitos saludables tiene incidencia directa sobre la calidad del sueño.
Mejora tu condición física
Como es de esperar, una dieta adecuada junto a una rutina de ejercicio físico tienen la capacidad de transformar progresivamente el físico de cualquier persona. Con el ejercicio eliminarás toxinas y podrás deshacerte de la grasa que se va acumulando en el cuerpo, además de desarrollar masa muscular, lo cual se traduce en mayor sensación de bienestar.
Fortalece huesos y articulaciones
La combinación de dieta y ejercicio regular consigue fortalecer tus huesos y articulaciones, previniendo lesiones graves que puedan interrumpir tu rutina habitual. Obtener los nutrientes apropiados como la vitamina D y el calcio, permite reducir la probabilidad de desarrollar enfermedades como la osteoporosis.
Comienza a desarrollar hábitos más saludables
¿No sabes por dónde empezar? Aunque desarrollar hábitos saludables puede parecer complicado, la realidad es que podemos comenzar con pequeñas acciones, entre ellas:
- Reducir la ingesta de alcohol e intentar eliminarla por completo.
- Evitar el tabaco.
- Incluir en tu dieta alimentos frescos como frutas, verduras, legumbres y hortalizas.
- Limitar el consumo de alimentos procesados y comida de escaso valor nutricional.
- Dormir el tiempo adecuado. Por lo general, unas 7 horas y media cada noche.
- Beber agua. Se recomienda mantenerse hidratado bebiendo la suficiente cantidad de agua al día.
- Cumplir una rutina de ejercicio físico de intensidad moderada, al menos, 30 o 45 minutos por día.