La comprensión de la salud ha sufrido una evolución considerable, pasando de un visión enfocada en el aspecto físico del paciente a un entendimiento integral y holístico de toda la situación. Este avance resulta especialmente importante, pues tiene la capacidad de mejorar la calidad de vida de aquellos pacientes afectados por enfermedades crónicas.
Actualmente, los pacientes pueden optar por la medicina integrativa, cuyo enfoque abraza la importancia de considerar aspectos fisiológicos, psicológicos, nutricionales y sociales a la hora de tratar las enfermedades.
En lugar de centrarse únicamente en tratar los síntomas de una enfermedad, la medicina integrativa también aborda las causas subyacentes y el conjunto de factores que perjudican a la salud de las personas, reconociendo que el bienestar de una persona no puede entenderse únicamente desde una perspectiva médica tradicional.
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¿Qué es la medicina integrativa?
La medicina integrativa se basa en la combinación de prácticas y terapias médicas convencionales, utilizando diversos tratamientos alternativos como complemento, buscando el bienestar holístico del paciente.
Este enfoque, lejos de menospreciar la potencialidad de la medicina natural, conviene en aceptar todos sus beneficios, entendiendo que la atención del paciente debería englobar todos los aspectos de la vida del individuo, incluyendo aspectos nutricionales, psicológicos y fisiológicos.
Para recibir atención médica y buscar la restitución de la salud desde una perspectiva holística, es posible acudir al Institut de Salut i Medicina Integrativa Medicus Gaia, donde médicos con formación académica convencional, incluyen en su práctica clínica tanto medicinas como terapias complementarias.
Principios de la medicina integrativa
Este ámbito de la práctica médica se rige por una serie de principios fundamentales, pudiendo destacar lo siguiente:
Considera al paciente como un individuo integral
Los médicos que aplican la medicina integrativa reconocen la existencia de una interconexión entre los aspectos físicos, emocionales, mentales y espirituales, todos los cuales influyen en la salud de una persona. De este modo, aborda los síntomas físicos del paciente junto a sus emociones, buscando garantizar su bienestar general.
Enfoque complementario y alternativo
Combina terapias convencionales y las complementa con tratamientos alternativos que estén respaldados por la investigación científica sólida. Esto permite aprovechar una gama más amplia de herramientas terapéuticas, evitando el enfoque convencional que suele ser meramente paliativo.
Prevención y promoción de la salud
Tal y como ya se ha mencionado, otro de los principios que rige este modelo de atención es su énfasis en la prevención de enfermedades. Esto se logra fomentando hábitos que deriven en una vida más saludable. Por ejemplo, hábitos como el ejercicio regular, una buena nutrición y la correcta gestión del estrés como formas de mantener la salud.
Tratamiento de las causas subyacentes
Con la medicina integrativa se busca abordar las causas subyacentes de las enfermedades y no solamente los síntomas que presenta el paciente. Por esto, busca identificar y tratar los factores que contribuyen en la promoción de una curación más profunda y sostenible en el largo plazo.
Beneficios de la medicina integrativa
Este modelo de atención médica personalizada y centrada en el paciente ofrece varios beneficios, por ejemplo:
Influye de forma positiva en la calidad de vida
Al centrarse en el bienestar integral del paciente, este puede alcanzar una mejor calidad de vida. Por ejemplo, podrían utilizarse diversos tratamientos alternativos para ayudar a reducir el dolor, la ansiedad y el estrés, mejorar el sueño o incrementar los niveles de energía, todo lo cual influye sobre el bienestar general del paciente.
Aumenta la participación del paciente
Busca que el paciente asuma un papel más activo dentro del proceso de recuperación. Esto significa que el médico toma en cuenta sus necesidades y preferencias individuales, permitiendo al paciente tomar decisiones informadas sobre su propia atención. De este modo, los pacientes pueden sentirse empoderados y comprometidos con la curación.
Reduce los efectos secundarios de tratamientos convencionales
Con mucha frecuencia se utiliza la medicina integrativa como una forma de ayudar a reducir los efectos secundarios negativos de ciertos tratamientos médicos, como la quimioterapia o la radioterapia. Sin duda, una forma interesante de intentar mejorar la calidad de vida en pacientes con enfermedades crónicas o sometidos a tratamientos agresivos.
Incrementa la adherencia al tratamiento
Debido a que ofrece un tratamiento personalizado y considera los aspectos emocionales y mentales del paciente, logra incrementar la adherencia al tratamiento recetado. El paciente será más propenso a seguir las indicaciones al pie de la letra, pues estas resonarán con su sistema de valores y necesidades individuales.
Entrega un enfoque más holístico
Finalmente, es un modelo de atención médica que entiende la vinculación entre el cuerpo, la mente y las emociones del paciente. Gracias a este enfoque integral, se consigue comprender mejor las causas subyacentes de las enfermedades y, en consecuencia, ofrecer una atención más eficiente.