Para todas aquellas personas que poseen propiedades inmobiliarias destinadas al arriendo, existe la posibilidad de que sus inquilinos se conviertan en morosos, razón por la cual pudieran preferir no alquilar sus propiedades para evitar riesgos e incomodidades innecesarias.
Ante esta circunstancia se ha desarrollado el seguro de alquiler, el cual se refiere a un método que permite proteger la propiedad inmobiliaria frente a las deudas causadas por inquilinos morosos.
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El seguro de alquiler, un instrumento en auge después de la crisis financiera
Después de la pasada crisis económica y de las dificultades que enfrentó el sector inmobiliario, a causa de inquilinos que perdieron su capacidad de pago debido al paro, puede verse un aumento del interés en comprar, vender o alquilar pisos.
Sin embargo, el aumento va acompañado por otras cifras interesantes: la contratación de seguro de alquiler o seguros de impago, ha crecido en un 22%. Este seguro, permite que los propietarios puedan proteger su patrimonio, en caso de que los inquilinos caigan en morosidad.
Al contar con un seguro de alquiler, el propietario garantiza recuperar su vivienda en caso de impago y de cobrar por las rentas impagadas. Además, si el moroso ha causado desperfectos, te compensan por los daños. Una tranquilidad que ofrece este tipo de seguro de impago por alquiler, que vale la pena tenerlo en cuenta a la hora de alquilar una vivienda.
6 claves sobre el seguro de alquiler que necesitamos tener en cuenta
Para un propietario, es sumamente importante mantenerse informado sobre el funcionamiento de este sistema de aseguramiento inmobiliario. Es por ello que presentamos algunas claves que deben analizarse antes de contratar un seguro de impago.
Cobertura
Esta clase de seguro le garantiza al propietario el pago completo del alquiler, si el inquilino decide no realizar los pagos correspondientes a sus mensualidades. Adicionalmente, se incluye un seguro que protege contra el vandalismo, por hasta 6.000 euros.
Cumplimiento
Las cifras de impago en España, son superiores al 4%, pero para las personas que cuentan con una propiedad asegurada, suele ser menor al 0,05%. El 20% de los propietarios, han decidido contratar esta clase de seguro para proteger sus ingresos y patrimonio.
Rentabilidad
Los precios de este seguro pueden variar, dependiendo del periodo e indemnización que hayan elegido, pudiendo ser de 6, 9 o 12 meses. En este punto, es necesario analizar el mejor producto y el precio más adecuado.
Funcionamiento
Cada empresa tiene sus propios protocolos y formas de manejar el impago. En general, el propietario deberá poder comunicarse con la aseguradora y planificar con ella cada paso que debe darse en caso de que su inquilino presente problemas con el pago.
Requisitos
Solamente el propietario de una propiedad puede contratar este tipo de seguro. Suele estar garantizada la defensa jurídica si no te pagan o se realizan obras no consentidas, desperfectos o no se cumple el contrato.
Excepciones
No todas las propiedades inmobiliarias tienen acceso a pólizas de seguros anti-impagos. Quedan por fuera, aquellas propiedades que se encuentran destinadas a usos turísticos, como locales, estacionamientos y negocios en general.